sábado, 28 de abril de 2012

El Día del Golero



Durante la historia de la humanidad, se acumularon un sinfín de promesas, todas a realizarse el Día del Golero. Lo que nadie daba por hecho, es que en 1825, ése día llegó a Palos del Sur, pueblito sumergido en lo más profundo de Paso de los Toros.
El anuncio del Día del Golero, y su aprobación fue realizada por unos pocos que casi no tenían deudas pendientes -al menos, en el Día del Golero- y por supuesto que hubo controversia desde el inicio. Unos decían que debía ser el día de las croquetas, por el dicho "Vení mañana que hay croquetas", y otros a favor del "Día del Golero". Según encuestas realizadas en el pueblo, la situación era insostenible y desembocaron en dicha decisión.
Todo el pueblo estaba paralizado, nadie hacía nada. Se habían acumulado con el tiempo, miles de promesas, y ya nada quedaba por hacer. Primero fue Gabriel en el almancén. Llegó, agarró leche, pan y le dijo, "te lo pago el Día del Golero". Manuel, dueño del comercio, se lo tomó con humor, y asumió que en breve tendría su cuenta saldada, por lo cual aceptó. Gabriel comentó a sus vecinos, y al ver que funcionaba fueron de a poco a probar dicha tarea. Con el paso de los días, y Manuel ya con pocos fondos, decidió probar la mecánica con su proveedor. A las 5 de la mañana llegó el repartidor de leche. Descargó como todas las semanas los cajones y al momento de cobrar: "Gracias jefe, te lo pago el Día del Golero". A las risas, el repartidor pensó que era un chiste, pero cambió la cara cuando Manuel le comentó que en el pueblo estaban haciendo eso, y hasta le mostró un manojo de pagarés, hechos en papel de libreta, que decían con lapicera "Pagaré el Día del Golero" y debajo el nombre y monto.
De a poco, todos fueron acostumbrándose a ésta modalidad de negocio. Palos del Sur vivía una suerte bonanza, en donde todos tenían de todo y nadie pagaba nada. Todos estaban muy felices, todos los días eran de fiesta. Las noticias se esparcieron y hasta los pueblos linderos se enteraron, pero corrieron con poca suerte, dado que era un beneficio exclusivo para los habitantes de dicho lugar.
A los pocos días, y como dicen la alegría va por barrios, así como llegó, se fue rápidamente. Los proveedores dejaron de entregar productos, porque escaseaban. Ya no sólo en negocios se usaba el Día del Golero, si no también en el día a día impregnado en la cultura general. Cuando alguien no tenía ganas de hacer algo, decía "lo hago el Día del Golero" y quedaba sellado. Muchos asados y reuniones no se hicieron, porque quedaron en hacerse el Día del Golero. Muchas parejas terminaron, por miedo a decirse "no" de frente, era mas fácil prometerse que la única forma de estar juntos, era en el Día del Golero. Hasta la misa el cura no volvió a dar, porque un día enfermo y molesto, dijo que si no la realizaba el, se haría el Día del Golero. Con ello vino el desorden, caos en los caminos, robos a los campos, y la gente molesta porque ya no tenía servicios. Ni la policía trabajaba, porque abarrotada de trabajo, también utilizaba el Día del Golero para calmar los ánimos.
Es así que en la noche anterior, entre unos pocos que tenían voz y voto dentro del pueblo, declararon oficialmente el día siguiente 28 de Abril, como el día Oficial del Golero en Palos del Sur. El anuncio en la plaza del Pueblo, dejó atónitos a todos. Nadie lo esperaba. Algunos gritaban que era inconstitucional, otros lloraban, y algunas madres y padres taparon los oídos a sus hijos.
Tardaron 15 meses en saldar sus deudas la mayoría de sus deudas. Muchos tuvieron que devolver lo adquirido, trabajar doble horario para poder compensar lo gastado, y otros pasar vergüenza en la plaza haciendo acrobacias o proezas imposibles de realizar.
El Día del Golero sigue existiendo en Palos del Sur, pero no se habla de él. Dicen que algunos todavía están pagando, pero nadie se anima a preguntar, por miedo a que les recuerden alguna deuda olvidada por ahí. El cura del pueblo, da misa todos los domingos, inclusive estando vacía. Nadie sabe si está cumpliendo con su labor, o pagando al Señor las misas en su haber.

lunes, 16 de abril de 2012

El momento justo


Mi viejo decía que las cosas a uno lo esperaban, y siempre me gustó esa definición. Un tanto esperanzadora, y otro tanto intrigante también.
Por ejemplo, hace un año aproximadamente me regalaron unos amigos, un reloj pulsera Casio, que atrás dice "Japan. Cased in China". Al yo usarlo, simplemente siguió la historia del reloj, que llegó a mí, en el momento justo. 
Unos días atrás, alguien lo estaba eligiendo en la tienda de relojes para comprarlo, y entre todos los que había fue el que encajó justo con lo que se buscaba para luego regalármelo. Unos meses atrás llegaba a la tienda de relojes, junto a varios paquetes de un encargo para reponer stock. Otros tantos meses atrás, llegaba un container a Uruguay para esperar en el depósito a ser distribuído desde China. Tiempo antes, el reloj estaba en los depósitos de china, recién ensamblado, esperando para ser enviado por barco alrededor del mundo. Antes de eso, estaba siendo ensamblado en la fabrica en Guangzhou por máquinas y obreros que habían recibido las piezas desde Japón. Y semanas antes, Guangzhou recibía desde Casio Japón la materia prima para ensamblar el reloj.
Las personas también esperan a lo largo del tiempo, y van cambiando, "ensamblándose" y creciendo hasta que en el momento justo, uno se las encuentra. Conocer a una persona durante mucho tiempo y saber que quizás se cruzaron tiempo atrás sin conocerse, es fabuloso, porque tenía que ser así, porque de no haber sido así, no serían lo que son ahora.
Esperanzador, y desde éste punto de vista está buenísimo vivir el día a día. Hay cosas o personas que podés tener al lado, y no interactúan porque no es el momento ahora; así como también hay muchísimas cosas, que están esperándote para formar parte o cambiarte la vida, desde hace tiempo, recorriendo su camino, hasta que llegue el momento justo en que te encuentres con ellas.

domingo, 15 de abril de 2012

Soñando por soñar


Todo sea por la venta, el rating, mientras los consumidores olvidan y se adaptan.
El ser humano se adapta, y con el paso del tiempo lo que parece ofensivo, más adelante será normal. En el año 1996, decir "Marta sos la número uno, Marta cuando pueda te vacuno" era algo ofensivo y el tema "El día que Artigas se emborrachó" una condena. Recuerdo a mi profesora de canto en la escuela diciendo que la banda "El Cuarteto de Nos" era la decadencia de la juventud, hostigando fuertemente a quienes habíamos mostrado aprecio por dicho grupo. Han pasado algunos años, y ahora tenemos sexo hasta en la sopa (si, las sopas de letras que te venden tienen las letras S-E-X-O, ¡hacé la prueba!), resultando ser algo normal ya inserto en nuestros valores diarios. Con ésto, se crean programas de TV aceptados como Soñando por bailar, o por vender, que nos muestra envidia, celos, enojo, puteadas, gritos, infidelidad, voyeurismo, estrategias mezquinas, sexo, personajes bizarros, todo hecho para llegar a lo más alto, para llegar a "Tinelli". Sería trucho negar que por momentos puede ser interesante ver un importante puterío en la tele (todos disfrutamos de ése morbo), tirándose y diciéndose cualquier cosa, pero es curioso verlo como un ejemplo para el público, y de lo que la gente es capaz de hacer para llegar a su objetivo. Sepamos que posiblemente próximas generaciones podrán vivir inconscientemente lo visto en la tele, y sabrán que si uno pisotea a los demás para lograr su meta, tendrá no sólo la misma cumplida, si no también repercusión mediática, fama y dinero. Los productos en la TV generalmente no cuentan con buena calidad, y para ser consumibles a grandes escalas, deben bajar su nivel y llegar a lo básico, a la temática de barrio, o de conventillo, ésa que todos conocen, y cualquier persona de cualquier estrato social puede decodificar (si es que queda algo por decodificar), ya sea porque sabe de lo que se está hablando, le divierte la pelea, o le gusta un culo o un bulto.
En nombre de Dios muchos Hombres se han peleado, creado guerras, y por lo visto en el nombre de Tinelli podemos también.
No juzgo a quienes miran, crean el producto, o quien se lleva todo el dinero a costas del resultado. Pero para mi, el éxito, está en la perseverancia, el trabajo en equipo, la creatividad y la mejora contínua. Igual da un poco de miedo, que con el paso de los años no tenga razón.

jueves, 5 de abril de 2012

Sushi con chimichurri



"Hoy puedo ver todo lo bueno que hay aquí, y admirar las tradiciones que hacen grande a mi país... Tomarme un mate, bizcochear, chistarle al guarda, ir al bar por unos trucos y soñar con ser campeón"*


Hoy puedo ver todo lo bueno que hay aquí, puedo ver que estamos pasando por una época de bonanza. Época que por si no te diste cuenta, todos los medios están meta y darle con que estamos en un buen período, a todo lo que da para que te pongas contento, porque estás viviendolo, o porque está a la vuelta de la esquina y te puede tocar.
Admirar las tradiciones que hacen grande a mi país, como pedir Sushi a domicilio, como que no haya nunca taxis porque todos tomamos uno en las horas pico, como competir con mis amigos por quien la tiene mas grande, haciendo referencia a la pantalla LED del living, como no sacar fotos con una point and shoot y pensar en una Canon o Nikon réflex aunque la vaya a usar siempre en automático, como viajar en avión a Buenos Aires en lugar de ir en barco, como meter caribe y cuba porque lo podía pagar en 24 cómodas cuotas, como tener 4 tarjetas de crédito "por las dudas", y como comprar comida pre-hecha y calentarla en el micro para casi todos los días.
Tomarme un mate, bizcochear, o mandarme un Smirnoff Ice, mientras miro una murga. Y en lugar de mate, clavarme un energizante o vitamínico para estudiar.
Chistarle al guarda, o recagarlo a pedos porque mi pasaje es para ir cómodo y él no hace su trabajo bien, y yo "le estoy pagando el sueldo".
Ir al bar por unos trucos, o jugar al Triviador Mundo en facebook contra gente que ni conozco, pero respondo mas rápido que ellos con el google abierto en la otra pestaña.
Soñar con ser campeón, o no soñar, porque ya somos campeones, porque fuimos de la Copa América, y "casi" del mundo, por salir cuartos. Quien dice "casi", dice campeón, porque a los 3 primeros les podríamos haber ganado, porque si el viento hubiera estado a favor, no nos hubieran cobrado los goles contrarios, y las pelotas que no entraron lo hacían, somos campeones.
Mucha bonanza material, muchos cambios de tradiciones, todos alardean y muchos aprovechan. En el fondo, seguimos siendo iguales. Ya que estamos, y no te cuesta nada, estaría bueno, al final del día, cuando te cepilles los dientes, y te mires al espejo, preguntarte cuanto creciste como persona, y que bonanza personal estás viviendo y compartiendo con tus seres queridos. En época de crisis, es la moneda que valdrá.


* Cito al célebre poeta Uruguayo Ruben Rada

El Principe de Hamburgo (II)



¿Sabían que? La palabra Molleja viene del griego "Mollae" que significa "pared guresa, no glandular con una fuerte musculatura". EL 31 de octubre de 1512 el Príncipe de Hamburgo decidió hacer un banquete con sus mas allegados. Pidieron asado y la servidumbre la condujo hacia la cocina. Además del asado (que posteriormente se transformaría en hamburguesas) pidió -"Ah, y de paso si tienen, no me traen una pared guresa, no glandular con una fuerte musculatura y limón?" a lo que la servidumbre, enojada por tal pedido llamaron al Príncipe "pero que Molleja!", y desde allí generaciones a generaciones se fue pasando el nombre, inclusive el Príncipe, sin saber que era su propio apodo. Ésa misma noche, un grupo de jóvenes -más tarde ejecutados- tirarían bolsas de sangre al patio, agregándo morcillas al asado, pero no seguiremos ahondando dado que ésta historia fue contada en un post previamente.

Alta cagada



Imaginate un parque. ¿Qué se te viene a la mente? Seguramente un predio con pasto verde, sol, aire fresco, niños jugando, alguna fuente, y por suerte en nuestra ciudad tenemos algún lugar que otro con ésta característica. Todo muy lindo, Uruguay Natural, salvo que hay un pequeño detalle que agregar, los teresos de los animales, en particular los perros.
Todo bien con los perros, y con la gente que les gusta. Considero que es un bicho fiel, tal como dicen, que siempre está para alcahuetear al dueño, pero hay cada perro, que come a la par de una persona y lo que expulsa hasta puede superar en tamaño y actitud. No quiero entrar en un relato escatológico de maraños, pero es inevitable dejar pasar por alto que nuestros parques, calles y hasta playas están inundados de sorete de can.
Recorrer 3 cuadras de cualquier barrio, puede ser muy parecido a la mejor aventura de Indiana Jones, esquivando obstáculos de maraños por doquier, y si piso alguno... -que bien! Suerte! Tenés que ir al Casino!- LAS BOLAS. Esa es una excusa pelotuda que inventó alguno para que no te sientas como un gil por pisar terrible plasta, y seguir con ése tufo en la pata durante 1 horita o mas. Está todo bien con tener un perro, pero dueños, PONGANSE LAS PILAS. Entiendo que es feo chapar con la mano las necesidades, por mas bolsa que te encajes en la mano, pero, ta, peor para los demás que se la tienen que fumar.
Cosa fea es darte cuenta que pisaste caca de perro. Más fea si era caca media blanda. Más fea si era además calentita, recién hecha. Más fea si traspasó para los lados del pié. Más fea es cuando el zapato es de gamuza. Más fea, es si eran zapatos recién comprados. Más fea, si los zapatos venían con una falla en la suela y se pasó para adentro. Más fea si lo que pisaste tiene color amarillo. Más fea, luego de todo ésto estás adentro de un ómnibus con 6 horas de viaje por delante.