de perros y perros

Nunca fui mucho de los perros. Mi contacto mas cercano con un can fue tener una perra en casa que era de mi hermano.
Para mi los perros eran animales, seres que si bien son domésticos, y se adaptan a tu forma de vida, el cariño que podés tenerles es acotado, bastante superficial, sin entrar en melancolías extremas. No entendía a la gente que si los tiene. Para mi, los viejos eran los únicos que trataban a los perros como personas, como hijos, porque al tener ya su nido vacío, éstos animales oficiaban de reemplazo al hueco del hogar.
Un día, compré una perra, de regalo para mi novia, para su cumpleaños. Al vivir juntos iba a ser "dueño" por primera vez.
Cuando llegué al lugar donde tenía que levantar a la perrita me la dieron y era muy chiquita, entraba en mi mano y se salía para afuera un poquito más. Me olfateaba y me mordía contínuamente, mientras yo trataba de prestar atención a las mil indicaciones que el veterinario me hacía. Finalmente me fui de ahí y llegué a casa. Y ahi quedamos, los dos, solos, durante unas horas hasta que llegara mi novia. En ésas horas, la perra se dedicó a explorar todo el apartamento, así como también bautizarlo de sus necesidades por todos lados. Pero lo más curioso fue cuando me fui a la cocina a prepararme algo para comer. Estaba concentrado en la tarea, y por un momento descuidé lo que estaba haciendo la perra, que asumí seguía investigando, y cuando quise ver sentí en mi pié un mentón que se apoyaba para quedarse ahí dormida. Apenas unas horas de conocernos, optó por quedarse ahi conmigo, bastante incómoda por cierto pero según su criterio que acababa de adoptar, segura.
Atiné a agarrar el celular y sacar la foto porque realmente no podía creer.
Y fue así como me compró. Hasta el día de hoy le gusta dormir cerca de uno de nosotros, recostada.
Muchas veces pienso cuanto tenemos para aprender nosotros de los perros. Que distinto sería el mundo si luego de unas horas, confiáramos en la gente plenamente, sin tener consecuencias al respecto.

Mentiras verdaderas

No lastres todo lo que ves. Mails hoax, y tambien dichos populares que repetimos como unos chotos, como por ejemplo que el Himno del Uruguay es el mejor del mundo.
En tiempos de redes sociales, una mentira se transforma en verdad dicha mil veces, es muy probable, porque una mentira se transforma en verdad compartida mil veces o con la mitad de likes en facebook. Parece que la humanidad no avanza, y si antes decíamos que no seamos giles, que no tenemos que creer en todo lo que aparece en la tele, parece joda que con la explosión de internet y las redes sociales, no sólo le seguimos creyendo a la TV, si no que tambien anexamos un medio de comunicación más, que tiene muchas bondades, pero también mucho de fuente insegura, si no nos ponemos medianamente críticos ante la ola de información. Bueno, ése es otro tema también, se está generando por segundo mucha, muchísima información con la cual estamos siendo bombardeados. Para cuando termines de lees éste breve parrafo, ya hay 600 videos nuevos de Youtube, 1500 posts y casi 100.000 tweets. Evidentemente no podemos estar chequeando todo lo que nos llega, pero tampoco comer todo como si fuera de primera calidad.
Yo nací escuchando siempre que el mejor himno del mundo era el de Francia, y el segundo era el de Uruguay, y por momentos esa versión cambiaba, quedándonos en primer lugar. Se ve que con el tiempo alguien escuchó mejor nuestro himno, o el que votaba por el de Francia murió. Lo cierto es que el bolazo mas grande de nuestro país, alguien lo inició y nadie, lo cuestionaba. No existe una organización con aval internacional que diga que himno es mejor que cual. Además si existiera, cuales serían los criterios para elegirlo? Ya bastante complejo es decir si una canción es mejor que otra, como para que venga un organismo y lo decrete. Aún así, paradójicamente todos estamos deacuerdo que el mejor himno del mundo es el Francés. Pero, es preferible ésto, y no al menos robar la plata como los himnos de Finlandia y Estonia que son iguales pero con distinta letra.
En resumen a toda esta ola de información, sepamos que en un futuro, no muy lejano, la destreza del más apto, será el que pueda filtrar entre éste mar de datos, lo más nutritivo para su desarrollo, y sacarle el mejor provecho, sin esconderlo de los demás.

Tecito

No debe haber articulo más misterioso que un sobrecito de Té. No es joda. Posta.
Esta ahi, cerrado, y nadie se pregunta que es lo que contiene. Simplemente creemos lo que hay, aún cuando el sobre tiene una textura clara que no nos permite ver 100% el contenido interior.
Entonces, totalmente confiados, sumergimos en agua caliente el sobrecito, y al ver que el líquido se tiñe de amarillo/naranja, entonces aprobamos interiormente que el producto que compramos es válido, casi parcialmente digamos, hasta que lo probamos y tiene gusto a Té.
Pero en el medio de esto, no te preguntaste si ¿Rrealmente el Té de bolsita tiene Té realmente en su interior? ¿Si justo te estás tomando la Pasta Base del Té?
Hay productos en los que uno puede comprobar su calidad con eficacia, por medio de nuestros sentidos (y eso que es una forma trucha de comprobar la calidad, porque son rápidamente engañables), pero en el caso del té, son pocas las variables que tenemos para comprobar y muchas las probabilidades porque no nos dejan ver su interior!
¿Y lo peor? Que nunca (salvo casos accidentales que son muy molestos) vas a saber si el saquito estaba contaminado o tenía algo raro adentro porque cuando lo termines de usar, lo tirás cerrado!
No es por sembrar el pánico, ni mucho menos, pero creo que hay una mafia del Té.
Durante años servían Té a la realeza, con productos cuidadosamente seleccionados, de los jardines del Reino. Ahora, varios años después, y con afán de maximizar ganancias en un sistema completamente hambriento de utilidades para los inversionistas, procesan ramas y deshechos de insectos en lugar de hierbas y hojas nutritivas, que con colorantes del sabor comercializado, satisfacen a los clientes más exigentes, pasando tranquilamente por sus "controles sensoriales de calidad".

La cama

Todo transcurre en la cama. Es increible como el 25% aproximadamente de nuestras vidas, pasamos durmiendo. Pero en realidad, teniendo en cuenta que hay otras cosas que también transcurren en la cama, ése porcentaje podría variar, yéndose a una cifra aún más grande.
Todo lo bueno y lo malo pasa por ahí, casi sin darnos cuenta.
Dormimos, miramos la tele, tenemos sexo, charlamos, saltamos, nos recuperamos de una enfermedad, descansamos, nos deprimimos, estudiamos, comemos, trabajamos, todo esto de a uno, de a dos, o más personas. Y si abusamos de la cama, aparecen los problemas de salud.
La cama es así de espectante, sin hacer nada, pero haciendo todo.
Nos ve nacer, acompaña, cura, y al final nos deja morir.

Mueca

Vemos pasar en la calle, una sonrisa de una persona, algo muy sutil, apenas una mueca en la cara, que expresa un gesto que nos proyecta hacia un momento en el pasado, un recuerdo, que acompaña una vivencia, de esas que te erizan la piel, que te hace ir años hacia atrás, muchos años atrás, te remontan a tu niñez, y te hacen recordar un montón de cosas, determinados lugares, los aromas, las personas que te acompañan, objetos que te rodean, típicos de ése lugar con historia, historia pasada, pero todavía presente, que por ahí no sabías que estaba en tu memoria, y de golpe te sorprende, por que no te lo esperabas, y porque todo esto transcurre en una milésima de segundo.

Descuentos

Llueve y no es agua, son descuentos. Por todos lados, descuentos por aquí, descuentos por acá, cupones con descuento. En el mundo en que vivimos, ya no vale más pagar por el precio que se anuncia, vale más pagar menos.
A ver si nos entendemos, todos queremos pagar menos, pero un buen precio puede resultar ser una droga adictiva que hace que terminemos comprando más, mucho más de lo previsto. Así funciona nuestro cerebro, para aprovechar el momento, porque no se va a volver a repetir, por ser único e irrepetible, ejecutamos el consumo a mansalva.
Si lo pueden poner a ese precio, entonces ¿no nos están robando siempre cuando compramos las cosas a lo que realmente sale?
¿Un descuento no es una falta de respeto? Es como decirte en la cara, mirá que tooodo éste tiempo que viniste a comprar, pagaste más caro cuando en realidad podíamos vendértelo a éste precio.
Me preocupa el tema, porque en una de ésas, nosotros mismos, somos el descuento de alguien.

Snooze (I)

Beep! Beep! Beep!
Son las 6 am, y Fran ya se tiene que levantar para trabajar. Si bien le cuesta un poco, lo logra como todos los días. Prepara su desayuno, un yogur con cereales, unas tostadas con queso crema, y sale hacia su trabajo.
Ésta rutina viene repitiéndose desde hace varios años, desde que trabaja en la Papelera Moriva. Llega puntual a las 7:30 y se retira a las 16:30 como todo el mundo, dentro de su turno.
Son las 8 am, un rato luego de que se va Fran, se levanta Adriana. Ella le cuesta un poco más levantarse hoy, y no sabe porqué. Anoche se acostó temprano, y había descansado bien. "Quizás me esté por engripar..." piensa mientras se toma un rápido café y sale a trabajar.